3.9.07

Libros



Librofilm, la librería de cine de Buenos Aires, desde 1988, nos envía un listado de obras disponibles. Aquí mencionamos las que creemos pueden ser útiles a nuestros docentes y alumnos.

Sanz-Magallón: Cuéntalo bien. El sentido común aplicado a las historias.
Mc Guilliam: Backstory 4. Conversaciones con guionistas de los 70 y 80.
Simsolo: Cine negro. Pesadillas verdaderas y falsas.
Murch: El arte del montaje.
Gettino: Cine Iberoamericano. Los desafíos del nuevo siglo.
Gettino: Cine argentino, entre lo posible y lo deseable.
Adelman: Cómo se hace un cortometraje.
Shuflebotton: Edición de video con AVID.
McGrath: Montaje y posproducción.
Field: Cómo mejorar un guión.
Austerberry: La tecnología streaming de video y audio.

Librofilm está ubicada en Av. Santa Fe 2450, Local 1 (Tlf. 4824-2142) y en Av. Corrientes 1145, Local 13 (Tlf. 4382-6258).

11.8.07

Marfici 2007



El Festival Internacional de Cine Independiente de Mar del Plata (MARFICI) convoca a
los cineastas a participar en su cuarta edición (del 2 al 11 de noviembre de 2007).

Cortometrajistas:
La competencia, en esta sección, recibe obras de hasta 20 minutos de duración, realizadas a partir del 1° de septiembre de 2006, en el país. Temática y género son libres.

Largometrajistas:
La competencia en la sección Cine Argentino aceptará obras finalizadas desde el 1° de septiembre de 2006 en adelante. Esta sección no es competitiva.

La recepción de los trabajos es hasta el viernes 7 de septiembre de 2007, y éstos se deben enviar para su preselección en DVD Pal o NTSC o VHS Pal. Las copias deben dirigirse al señor Miguel Monforte a la Oficina de Programación del Festival, situada en Av. Independencia 1950, Planta Alta, Mar del Plata (CP: B7600DIP), Buenos Aires.

Más información:

Miguel Monforte, programador de la sección
mmonforte@festivalmdp.org
mmonforte@copetel.com.ar
http://www.festivalmdp.org (Bases y planilla de inscripción del concurso)

3.8.07

Buenos Aires-Montevideo-Buenos Aires

Hay buenas noticias sobre Buenos Aires-Montevideo-Buenos Aires, un viaje de Emiliano Penelas.

El cortometraje Buenos Aires-Montevideo-Buenos Aires ha obtenido el segundo lugar en el CON-CAN Festival de Tokio , Japón y ha sido invitado a la Cuarta Muestra de cine "Piriápolis de película", en Uruguay.

También ha sido seleccionado para la Competencia Oficial en el 9º Festival de Cine Independiente de Grecia (), en septiembre.

Para quienes aún no han podido ver este cortometraje de Emiliano Penelas,profesor de SanIsidroCine, tienen la oportunidad que brinda Cortos I-Sat, que lo proyectará el martes 14 de agosto a la 1:10, es decir, pasada la medianoche del lunes.

29.7.07

Nuestro adiós a dos grandes maestros



Persona, de Ingmar Bergman.



La notte, de Michelangelo Antonioni.

28.7.07

El guión en el cine documental

A continuación ofrecemos algunos fragmentos de un extenso texto sobre el guión documental que ha escrito el reconocido cineasta Patricio Guzmán :



... El guión documental es tan necesario como en el género ficción. Es cierto también que es "un estado transitorio -como dice Jean-Claude Carrière, al referirse a los guiones de ficción- una forma pasajera destinada a desaparecer, como la oruga que se convierte en mariposa (...). Con frecuencia -dice- al final de cada rodaje se encuentran los guiones en las papeleras del estudio. Están rotos, arrugados, sucios, abandonados. Muy pocos son los que conservan un ejemplar, menos aún los que los mandan a encuadernar o los coleccionan". Sin embargo una película documental necesita sin duda la escritura de un guión -con desarrollo y desenlace- con protagonistas y antagonistas, con escenarios predeterminados, una iluminación calculada, diálogos más o menos previstos y algunos movimientos de cámara fijados de antemano. Se trata de un ejercicio tan abierto y arriesgado como necesario; es como la partitura para un concierto de jazz; es casi como el común acuerdo de "lo general y lo particular"; es una pauta que presupone toda clase de cambios. Pero sigue siendo un guión.

... La única ventaja del género es que el guión documental se "reescribe" más tarde en la moviola (porque se mantiene abierto hasta el final). En realidad el montaje documental no presupone sólo ensamblar los planos, sino concluir el trabajo de guión iniciado al principio de una manera prospectiva.

... Para mí, una idea buena se reconoce porque propone un relato o el desarrollo potencial de una historia. Si la idea original carece de esta facultad, no significa nada para nosotros. Una idea original debe estar preñada de algo; debe contener en el fondo una fábula, un cuento. Por el contrario, un enunciado, una simple enumeración temática, no tiene ninguna utilidad para nuestro trabajo. Ante todo, una película documental debe proponerse contar algo; una historia lo mejor articulada posible y además construida con elementos de la realidad. Una historia bien narrada con la exposición clásica del argumento, a veces con la aplicación del plan dramático que todos conocemos (exposición, desarrollo, culminación y desenlace), el mismo que utiliza la mayor parte de las artes narrativas.

... Veamos algunos de los tipos de ideas más comunes que, con frecuencia, emplea el cine documental (utilizando una lista de títulos conocidos):

Idea nº 1: Elegir un personaje
Nanook (1922) de Robert Flaherty
El misterio Picasso (1956) de Henri-Georges Clouzot
Los belovs (1992) de Victor Kossakovsky

Idea nº 2: Elegir un acontecimiento
Olimpia (1936) de Leni Riefensthal
Woodstock (1970) de Michael Wadleigh

Idea nº 3: Elegir una situación concreta
Drifters (1929) de John Grierson
Mein kampf (1960) de Erwin Leiser
Morir en Madrid (1963) de Fréderic Rossif

Idea nº 4: Hacer un viaje
El Sena ha encontrado París (1957) de Joris Ivens
América insólita (1958) de François Reichenbach
Ruta número uno (1989) de Robert Kramer

Idea nº 5: Volver al punto de partida
Hombre marcado para morir(1984) de Eduardo Countinho
Shoah(1986) de Claude Lanzmann
Réminicences d'un voyage en Lituanie (1990), de Jonas Mekas

... Puede afirmarse que una película documental se sitúa por encima del reportaje periodístico y por debajo del ensayo científico, aunque a menudo utiliza recursos narrativos de ambos y está muy cerca de sus métodos.

... A veces la obra previamente concebida se transforma en una cosa bastante distinta. Los recursos narrativos son los elementos que utiliza el guión para contar la historia. El lenguaje original del autor es sin duda el primero y el más obvio. Pero hay muchos tipos de recursos narrativos –la lista puede ser interminable– y por eso mismo conviene clasificarlos por orden de importancia y a la vez descartar los secundarios. Estos son los que yo utilizo: Los personajes, los sentimientos, las emociones, la acción, la descripción, la voz del narrador, la voz del autor, las entrevistas, las imágenes de archivo, las ilustraciones fijas, la música, el silencio, los efectos sonoros, la animación, los trucajes ópticos, y como ya se ha dicho: el lenguaje del autor

... Elegir los personajes es quizá la tarea más importante del director cuando explora sus escenarios. No es la búsqueda acumulativa de algunas personas vinculadas al tema sino el arduo trabajo de detectar, descubrir verdaderos personajes y "construirlos" cinematográficamente. Hay que localizarlos, fotografiarlos y después rodarlos en muchas dimensiones de su vida: monologando, dialogando, trabajando, viajando o guardando silencio. Los personajes principales constituyen el cuerpo dinámico de la idea central. Son los portavoces del guión y casi siempre son mucho mejores que el guión. Hay que jugar con protagonistas y antagonistas, es decir, hay que localizar personas que entren en conflicto y se contradigan delante de nosotros, buscando siempre el contrapunto, para que el tema fluya por si mismo. Así nos separamos de partida –y para siempre– de los documentales explicativos que tienen un narrador omnipoderoso.

... En el cine documental se establece un compromiso ético del autor con sus personajes. Naturalmente, esto no quiere decir que el director asuma como propias las opiniones ajenas. Pero cada personaje tiene el derecho a ser "lo que es" adentro de la pantalla (no afuera). Uno puede ejercer presión, discutir, callar, mostrar desconfianza, ironía, sarcasmo, etc., con ellos, pero siempre ADENTRO del cuadro y por lo tanto delante del espectador.

... Una película documental constituye una búsqueda –una expedición– donde los imprevistos son tan importantes como las ideas preconcebidas. Esta es la esencia de la creación documental (como ocurre también en la ejecución del jazz). Mantener el equilibrio entre lo nuevo y lo ya previsto es una facultad que el cineasta documental debe aprender a ejercer todo el tiempo

... Hay un momento en que el montaje "se adueña" de la película y avanza más allá de su propio terreno (el ritmo, la continuidad, la síntesis) entrando en otra fase, codeándose con el guión. Pero hay otros momentos en que el montaje sucumbe, cuando la fuerza documental de las imágenes –con su tiempo real– no admite más manipulación; cuando la energía de los planos –de la vida real– se sitúa por encima del ritmo convencional. Es decir, cuando la realidad supera al cine.

20.7.07

Ciclo de cine

CIUDADES, CULTURA Y POLÍTICA EN LATINOAMÉRICA

Desde el 13 de julio pasado, y hasta el próximo 28 de septiembre, los viernes, a las 19.00, en el salón San Martín de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se está proyectando un ciclo de cine latinoamericano que quiere mostrar la diversidad cultural de la región.


El programa es el siguiente:


Viernes 13 de julio
LA HABANA
SUITE HABANA
(Cuba, 2003, color, 80 minutos)
Dirección: Fernando Pérez
Delicioso documental que entrecruza historias de personajes anónimos, seres peculiares alternan sobre el tejido vivo de la ciudad. Cada uno de ellos representa la curiosa diversidad de grupos sociales que se mueven en La Habana de hoy.

Viernes 20 de julio
MONTEVIDEO
25 WATTS
(Uruguay, 2001, blanco y negro, 92 minutos)
Dirección: Juan Pablo Rebella y Pablo Stoll.
Intérpretes: Daniel Hendler, Jorge Temponi, Alfonso Tort y Valentín Rivero.
Montevideo, sábado, 7 de la mañana. El Leche, Javi y Seba todavía no se fueron a dormir. Cansados y aburridos, se sientan en el murito de siempre a tomar una cerveza. Son 24 horas en la vida de tres jóvenes montevideanos, retratada por los directores de la multipremiada “Whisky”.

Viernes 27 de julio
CARACAS
LA REVOLUCIÓN NO SERÁ TELEVISADA
(The revolution will not be televised, Irlanda, Holanda, EE.UU., Alemania, Finlandia, GB, 2003, color, 74 minutos)
Dirección: Kim Bartley y Donnacha O’Briain
El film narra los sucesos de abril de 2002 en Venezuela, donde el presidente Hugo Chávez fue depuesto de su cargo en un lapso de 48 horas. Un grupo de televisión irlandés se encontraba en el Palacio de Miraflores cuando explotó el foco del conflicto. Durante el rodaje del film, quedaron plasmadas imágenes que corroboran la tesis de Golpe de Estado, dejando de lado las explicaciones (posteriores) que se referían a un vacío de poder.

Viernes 3 de agosto
BOGOTÁ
LA ESTRATEGIA DEL CARACOL
(Colombia, Italia, Francia, 1993, color, 116 minutos)
Dirección: Sergio Cabrera.
Intérpretes: Gustavo Angarita, Eduardo Arias, Jaime Azcárate y Rosa Virginia Bonilla.
Los vecinos de uno de los barrios más pobres de Bogotá luchan para evitar que se derrumbe la casa en la que viven, propiedad de un millonario sin escrúpulos. Defendiendo el edificio contra jueces y policías, planean una original estrategia ideada y dirigida por Don Jacinto, un viejo anarquista español.

Viernes 10 de agosto
BUENOS AIRES
EL ARREGLO
(Argentina, 1983, color, 90 minutos)
Dirección: Fernando Ayala
Intérpretes: Federico Luppi, Rodolfo Ranni, Julio De Grazia, Haydeé Padilla y Susú Pecoraro.
Una familia debe sobornar a un empleado de una compañía estatal para que éste les de agua corriente. El padre -un hombre recto en su conducta y ético en cada una de sus decisiones- se opone a la coima. Así se trama esta historia de oposición directa entre un hombre común en defensa de sus principios y el empleado de la compañía como figuras simbólicas de un trasfondo social que se deja leer entre líneas. Sobre guión de Roberto “Tito” Cossa y Carlos Somigliana.

Viernes 17 de agosto
MÉXICO D.F.
EL CALLEJÓN DE LOS MILAGROS
(México, 1995, color, 140 minutos)
Dirección: Alejandro González Iñárritu.
Intérpretes: Ernesto Gómez Cruz, María Rojo, Salma Hayek, Bruno Bichir, Delia Casanova y Daniel Giménez Cacho.
Una partida de dominó une las historias de tres personajes habitantes de un barrio ubicado en el centro de la Ciudad de México: don Rutilio, dueño de la cantina local, macho mexicano al que sin embargo le atraen los muchachitos; Alma, la niña bonita y virginal del barrio, que desprecia al peluquero Abel por no considerarlo de su condición; la solterona Susanita , que acabará casándose con el vividor Güicho. Las historias se enlazan jugando con las reglas del melodrama mexicano, sus personajes y situaciones.

Viernes 31 de agosto
MEDELLÍN
LA VIRGEN DE LOS SICARIOS
(Francia / Colombia / España, 2000, color, 97 minutos)
Dirección: Barbet Schroeder
Intérpretes: Germán Jaramillo, Anderson Ballesteros, Juan David Restrepo y Manuel Busquets.
Ciudad de Medellín, Colombia. Un maduro escritor que vuelve a su tierra, una relación homosexual con un joven sicario, sexo, violencia y muerte en una ciudad tomada por los poderes de los cárteles de drogas, donde las deudas de sangre pasan de hermanos a hermanos y de amigos a amigos, como si la suerte de los vivos estuviese en manos de los muertos. Basada en la novela homónima de Fernando Vallejo.

Viernes 7 de septiembre
SANTIAGO DE CHILE
ESTADIO NACIONAL
(Chile, 2001, color / blanco y negro, 90 minutos)
Dirección: Carmen Luz Parot.
Primera investigación periodística en profundidad acerca de los hechos ocurridos entre septiembre y noviembre de 1973, cuando el Estadio Nacional de Chile sirvió como centro de detenidos políticos. Más de 12 mil personas pasaron por allí sin cargos ni procesos. Gran parte fue torturada. Más de treinta testigos, -ex prisioneros, sacerdotes, militares, periodistas, enfermeras, vecinos, etc.-, recorren el recinto y sus recuerdos, la historia de esos días.

Viernes 14 de septiembre
ROSARIO
ROSARIGASINOS
(Argentina, 2001, color, 90 minutos)
Dirección: Rodrigo Grande
Intérpretes: Federico Luppi, Ulises Dumont, María José Demare y Francisco Puente.
Treinta años pasaron desde que Alberto "Tito" Saravia y Castor entraron a la cárcel de Rosario. Treinta años estuvo esperándolos una valija llena de dinero, que escondieron bajo las aguas del río Paraná. Pero, cuando los dos salgan de prisión y vean que la valija ya no está, se perderán en una ciudad que fue de ellos y que ahora apenas reconocen.

Viernes 21 de septiembre
RÍO DE JANEIRO
CIUDAD DE DIOS
(Cidade de Deus, Brasil, 2002, color, 130 minutos)
Director: Fernando Meirelles
Intérpretes: Alexandre Rodrigues, Leandro Firmito, Phellipe Haagensen, Douglas Silva y Jonathan Haagensen.
Adaptada de la novela de Paolo Lins, retrata el crecimiento del crimen organizado en Cidade de Deus, un suburbio violento de Río de Janeiro, entre finales de los años sesenta hasta principios de los ochenta. El protagonista de la película es este barrio, visto a través de los ojos de "Buscapé", un joven demasiado frágil y tímido para una vida criminal. Nominada a cuatro Oscar, incluyendo Mejor Película.

Viernes 28 de septiembre
UN LUGAR EN EL MUNDO
(Argentina / España / Uruguay, 1992, color, 120 minutos)
Director: Adolfo Aristarain
Intérpretes: José Sacristán, Federico Luppi, Cecilia Roth, Leonor Benedetto y Gastón Batyi.
Convertido ya en un hombre, Ernesto y su familia regresan a un pueblo a doce horas de Buenos Aires, luego de pasar ocho años en el exilio, producto de la dictadura militar. Recuerda su niñez, los que fundaron una cooperativa que agrupaba a los pequeños ganaderos del valle, los tiempos de lucha en defensa de la lana de sus ovejas. Ganadora de la Concha de Oro en el Festival de San Sebastián, nominada al Oscar a la mejor película extranjera

12.7.07

Visita: Claudio Reiter

Recién llegado de trabajar en una superproducción de cine publicitario en Sudáfrica,el 3 de julio nos visitó y dio una charla magistral, Claudio Reiter, prestigioso asistente de dirección argentino.

Conversó con nuestros alumnos acerca del rol creativo y organizativo de los equipos de dirección y producción. El intercambio fue riquísimo.

Esta visita se suma a una serie de invitaciones de prestigiosos profesionales que vendrán a compartir su experiencia con nuestros alumnos y docentes.

Reiter ha prometido volver a visitarnos durante el segundo cuatrimeste.

6.7.07

Expresarse, según Chris Doyle



Christopher Doyle es director de fotografía de Happy Together (Wong Kar Wai), de Lady in the water (Night Shymalan) y de Invisible Waves (Pen-ek Ratanaruang), entre otras películas. Fue entrevistado por Pamela Biénzobas en el Festival de Berlín. A continuación publicamos algunos fragmentos de la entrevista, donde expone su punto de vista acerca de su profesión:

(...)
Uno tiene un gusto estético. Todos lo tienen. En mi trabajo, porque tienes una cierta experiencia visual y porque no queremos que se vea igual a todo el mundo, confías en esa experiencia visual personal más que la mayoría de la gente. Entonces sí, hay una estética. Pero lo llamaría gusto personal. Es la gran diferencia entre decir "quiero hacer un film noir", como Tarantino, y entonces imitar un cierto tipo de manera de hacer cine, o decir "sí, vi películas japonesas cuando era más joven, y por supuesto que hay una influencia, pero ésta es nuestra película". Si hay una influencia de otras fuentes, no importa porque la forma en que se expresa es más personal. Creo que ésa es una diferencia muy importante, por ejemplo entre Tarantino y Pen-ek. ¡Por supuesto que nada es original! Todo viene de lo que había antes, ya sea la bolsa de valores, o lo que vas a comer mañana, o el tipo de vida amorosa que tienes. Reconocerlo no es ningún problema, mientras lo asimiles como parte de tu propia vida. Y mientras se exprese a través de quién eres.
(...)
Creo que en el cine sólo hay tres personas. La persona delante de la cámara, yo, y el público.¿Y el director? ¡A la cresta con el director! Háblenle de eso a Cahiers du cinéma, no a mí. Ya no existen más "auteurs". Como con Internet, el "auteur" eres tú. Lo que hay que hacer es crear la relación más directa posible. Pen-ek no ve la película: la escucha. Es una forma muy interesante. Confía lo suficientemente en mí como para hacer las cosas sencillas. Por supuesto que hablamos de la estructura. Claro que pienso que nuestra relación debe ser extremadamente íntima. Creamos un espacio de trabajo para que la película resulte. Entonces puede incluir los errores, puede incluir cosas que pasan con el clima, porque sabes la dirección en la que vas. Y ésa es la gran libertad de trabajar con alguien como Pen-ek. O con Wong Kar Wai. Tienes un sentido de la integridad de lo que estás haciendo. Y sólo somos tú, yo y el público. Y es fantástico. Él sólo escucha para ver cómo va.
(...)
Todas las películas debieran ser un "ciao bella"', ¿no creen? Ésa es nuestra función. Si somos lo suficientemente claros, la forma en que respondemos a una idea puede ser compartida contigo. Ése es mi trabajo: tomar ideas y darles algo más que una imagen. Que casi puedas olerla. Si eso sucede una vez en una película, es una gran película. Así de simple. Ése es mi propósito: llevarte a algún lugar en que digas "sí, esto es la vida, esto es la tristeza, esto es la belleza…". Mi trabajo es concentrar eso en uno o dos momentos. Eso es lo que puede hacer el cine. O el arte… si quieres decir "arte".

25.6.07

El montaje, según Walter Murch


En un parpadeo es el libro que ha escrito Walter Murch, el montajista de películas como La conversación, El Padrino II o Apocalypse Now, de Francis Ford Coppola, quien comparándose con él lo ha definido así:

Somos tan distintos: yo tomo decisiones instantáneas confiando solo en mi emoción y mi intuición, Walter, en cambio, es pensativo, cuidadoso y metódico en cada paso. Yo alterno entre la exaltación y el desaliento, y Walter es constante, cálido y tranquilo. Tanto o más ingenioso e intuitivo que yo, él además tiene constancia. Walter es un pionero, como me gustaría serlo, y es el tipo de persona que debe ser escuchada cuidadosamente y debe disfrutarse".


A continuación, un fragmento de "En un parpadeo", donde Walter Murch define su actividad:

Mirando fuera del borde del cuadro

El editor es una de las pocas personas que trabajan en la producción de una película, que no conoce las condiciones exactas bajo las que fue rodada (o que tiene la posibilidad de no saberlo) y a la vez ser alguien que puede tener una tremenda influencia en la película.

Si ha estado involucrado en el rodaje la mayoría del tiempo, como ocurre con los actores, el productor, el director, el operador de cámara, el director de arte, etc., entonces estará al tanto de las condiciones, a veces sangrientas, de gestación y logro de cada uno de los planos. Y cuando revise el material, no podrá dejar de sentirse influenciado, porque en su mente, estará viendo, por fuera del borde del cuadro, todo lo que estaba sucediendo allí, física y emocionalmente, más allá de lo que realmente se fotografió.

'Nos costó mucho conseguir ese plano, tiene que estar en la película'. Usted (el director, en este caso) se convence de que lo que consiguió era lo que buscaba, pero existe una gran posibilidad de que pueda verse obligado a verlo de esa manera, porque le costó mucho dinero, esfuerzo, o tiempo, el conseguirlo.

De la misma manera, hay casos en los que, cuando rueda algo que detesta, cuando todos están de mal humor, y usted dice, protestando: 'Bueno, lo haremos, conseguiremos este maldito primerísimo primer plano como sea y terminemos con esto'. Después, cuando mira esa toma, todo lo que puede recordar, es el momento odioso en que fue hecha, y eso puede enceguecerlo ante los verdaderos potenciales que podría tener en un contexto diferente.

El editor, por otro lado, debe intentar ver lo que está en la pantalla, lo que realmente percibirá el público. Sólo de esta la manera las imágenes se verán libres del contexto de su creación. Enfocando en la pantalla, el editor debe usar los momentos que deban usarse, aun cuando ellos puedan haber sido rodados bajo coacción, y rechazar aquellos momentos que deban rechazarse, aunque ellos hayan costado una cantidad increíble de dinero, esfuerzo o dolor.

Supongo que estoy insistiendo en la preservación de un cierto tipo de virginidad. No se permita estar necesariamente impregnado por las condiciones del rodaje. Intente mantenerse al tanto de lo que está pasando, pero manteniendo un conocimiento específico tan pequeño como le sea posible, porque, finalmente, el público no sabe nada de todo esto, y usted debe ser el defensor del público.

El director, por supuesto, es la persona más familiarizada con todas las cosas que pasaron durante el rodaje, porque él es quien cargó con la mayoría de estos avatares, con toda la información del fuera del borde del cuadro. Entre el final del rodaje y antes de que el primer corte esté terminado, lo mejor que le puede pasar al director (y a la película) es que le diga adiós a todos y desaparezca por dos semanas en las montañas, o en el mar, o que se vaya a Marte o a alguna otra parte, e intente descargar este lastre.

Dondequiera que vaya, debe intentar pensar, tanto como le sea posible, sobre cosas que no tengan nada, absolutamente nada, que ver con la película. Es difícil, pero es necesario crear una barrera, una pared, entre el rodaje y la edición. Fred Zinnemann se iba y trepaba a los Alpes después del final del rodaje, sólo para ponerse en una situación potencialmente peligrosa y amenazante, donde tenía que pensar en estar allí y no en convivir con los problemas de la película. Entonces, después de unas semanas, volvía de los Alpes, de nuevo a la tierra, se sentaba en un cuarto oscuro, solo, la luz del arco voltaico se encendía, y miraba su película. Todavía estaba, inherentemente, lleno de esas imágenes de más allá del borde del cuadro (un director nunca será totalmente capaz de olvidarlas), pero si hubiera ido en forma directa del rodaje a la edición, la confusión lo habría embargado, y hubiese mezclado dos procesos diferentes del pensamiento: el del rodaje y el de la edición.

Haga todo lo que pueda para ayudar al director a erigir esta barrera, para que cuando él vea la película de nuevo, pueda decir: 'Bien, voy a suponer que yo no tenía nada que ver con esta película. Necesita algún trabajo. ¿Que se necesita hacer?'. Y el editor debe luchar tan duro como sea para apartar los deseos de lo que realmente está filmado, sin abandonar nunca los sueños sobre la película, pero intentando de todas maneras ver lo que realmente está en la pantalla.

Soñando en pareja

De muchas maneras, el editor de la película realiza el mismo papel para con el director que el editor de textos lo hace con el escritor, para animarlo en ciertos cursos de acción, aconsejarlo contra otros, para discutir si se debe incluir algún material específico en el trabajo terminado o si el nuevo material necesita tener agregados. Sin embargo, es el escritor quien entonces se va y reúne las palabras.

Pero en una película, el editor tiene también la responsabilidad por congregar las imágenes (es decir, las "palabras") en un cierto orden y con un cierto ritmo. Y aquí toma el papel del director para ofrecer consejo y asemejarse en mucho al momento donde el director habría aconsejado a un actor que interpreta un papel. Parece que la relación entre editor/director oscila de un lado a otro durante el curso del proyecto, en una ecuación donde el numerador se vuelve denominador y viceversa.

En psicoterapia hay una técnica que pone al paciente (el soñador, en este caso) junto con alguien que tiene que escuchar el sueño. Lo más pronto posible después de despertarse, el soñador se encuentra con su oyente para repasar los sueños de la noche anterior. Frecuentemente no hay nada, o simplemente hay una sola y
deplorable imagen, pero esto normalmente es suficiente para iniciar el proceso. Una vez que la imagen se describe, el trabajo del oyente es proponer una sucesión imaginaria de eventos basada en ese fragmento. Un avión, por ejemplo, es algo que todos recuerdan. El oyente propone inmediatamente que debe de haber sido un avión de transporte, que vuela por encima de Tahití, lleno de pelotas de golf para un torneo en Indonesia. Ni bien escucha esta descripción que se le ha ofrecido, el soñador protesta:
'No, era un biplano, y volaba encima de los campos de batalla en Francia, y Hannibal estaba disparándole flechas desde su legión de elefantes'. En otras palabras, el propio sueño, escondido en la memoria, se levanta en defensa propia, cuando se ve desafiado por una versión alternativa, y se re(b)vela. Esta revelación sobre los biplanos y los elefantes puede incitar al oyente a su vez para elaborar otra improvisación, que sacará hacia afuera otro aspecto del sueño oculto y así sucesivamente, hasta revelar tanto del sueño como sea posible.

En la relación entre director y editor pasa algo similar, donde el director generalmente es el soñador y el editor es el oyente. Aún incluso para la mayoría de los directores bien preparados, hay limites a la imaginación y a la memoria, particularmente al nivel de detalle fino, y es trabajo del editor el proponer guiones alterados, como un cebo para animar al sueño durmiente a subir en su defensa y así revelarse más totalmente. Y estos guiones alternativos se despliegan desde un nivel más general: ¿debe quitarse tal y cual escena para el bien del todo?, hasta el nivel de máximo detalle: ¿debe terminar este plano en este cuadro, o 1/24 de segundo más tarde, en el próximo?

Pero a veces el editor es el soñador", y el director el oyente, y será él quien ahora haga las ofertas, el cebo, para tentar al sueño colectivo, para revelar más sobre él. Como cualquier pescador puede decirle, 'es la calidad del cebo la que determina el tipo de pez que se pesque'.

12.6.07

Linda Seger en Buenos Aires

Página/12 publicó el pasado 8 de junio, con motivo de su visita a nuestro país, a una de las consultoras de guión más reconocidas internacionalmente: Linda Seger, autora de Cómo convertir un buen guión en un guión excelente y de Cómo llegar a ser un guionista excelente. A continuación, publicamos la nota:

—¿Qué tiene que tener un guión para ser muy bueno o excelente como usted lo llama?
—Una integración de historia, estructura, sistema y personajes.

—¿Un guión muy elaborado implica que una película también saldrá bien?
—La película puede ser buena, pero eso no quiere decir que vaya a ser un éxito comercial: hay temas que a la gente no le interesan, o tal vez no le gustan los actores. Entonces, hay muchas razones por las que una buena película puede no ser exitosa comercialmente.

—¿Qué grado de injerencia debe tener el director cuando el guionista es otro?
—El director está para construir la película usando el guión como plano o mapa. El escritor está llenando el guión y el director es el que lo visualiza. La mayor parte de los directores querría trabajar con el guionista en el último borrador del guión. Y si es una cuestión de hacer cambios de locaciones de grabación o cambios de actores, el director va a tener un rol respecto del guión.

—Muchas veces la gente elige una película porque trabaja tal o cual actor. ¿Se puede sostener una película con grandes actuaciones y un guión poco efectivo?
—No. De hecho, casi cada gran actor en su carrera ha tenido películas que fracasaron: Julia Roberts, Tom Cruise, incluso Meryl Streep. Casi todos los actores han estado en un punto donde su actuación no podía superar un guión fracasado.

—¿Qué diferencias existen cuando se trabaja con un guión original respecto de uno adaptado? ¿Hay menos espacio para la creatividad en este último caso?
—En ambas hay mucha creatividad, pero en las adaptaciones se requiere mucho análisis. Uno tiene que ver si va a hacer una adaptación natural o si va a hacer una adaptación difícil. Hay un dicho que reza: “Las mejores adaptaciones vienen de novelas que no son muy buenas”. De hecho, Duro de matar viene de una novela que nadie leyó. La aventura del Poseidón que salió en los años 70 fue una adaptación de un libro que no era muy bueno, pero salió una buena película. Algunas adaptaciones son más fáciles que otras porque tienen una historia fuerte, un comienzo y un final que son muy claros.

—A veces, los espectadores suelen decir sobre la película que vieron que “es muy hablada”. ¿Cuál es su análisis sobre esta modalidad? ¿Siempre debe haber un equilibrio entre la imagen y el discurso o esto depende del género?
—Depende un poco del género. El diálogo debería servir al personaje, pero uno tiene que tener cuidado de no sobrecargar al personaje con parlamento. A veces, es lo que llamo “las charlas de la primera cita” (risas). Es decir, conocernos, sin sustancia. Cuando se habla, la idea es que sean oraciones breves y de mucha ida y vuelta. A veces los guionistas hacen demasiados diálogos porque no saben usar bien la imagen. En mi opinión, uno debería poder ver una película bajando el volumen y entender la historia por las imágenes.

—Muchas veces los guionistas trabajan sobre una idea encargada por un canal o una productora. ¿Cuánto incide esto en la libertad creativa? ¿En qué se diferencia trabajar a pedido?
—Si uno tiene esa carga debería seguir la sensaciones del productor. Pero el productor va a querer un escritor que sea creativo y que, además de poder seguir las acciones, pueda traer ideas artísticas a la obra. El trabajo del escritor es: “¿Cómo trabajo dentro de esos parámetros con un producto que es artístico?” Y si uno está trabajando sobre una idea propia sabe que la idea hay que venderla después: “Soy libre pero tengo la responsabilidad de venderlo después”.

—¿Alguna vez indagó en las preferencias del público por determinados géneros? ¿Es algo que tiene que ver con las emociones personales?
—Yo he investigado las razones por las cuales las audiencias se conectan con ciertas materias sobre otras. No creo que sea el género el que haga o no el punto de conexión. Yo hago una sesión entera sobre este tema, sobre la conexión con los espectadores. Mucho tiene que ver con las ideas que se encuentran en la película. Por ejemplo, hay ciertas películas que los adolescentes van a ver porque tratan de cosas que están experimentando cotidianamente.

—¿Cuáles son los principales lineamientos de su método de trabajo?
—Básicamente son tres cosas que trato cotidianamente: estructura, personajes y tema. Yo no puedo decirle a alguien qué tipo de historia contar, pero sí puedo ayudar a dar forma a la historia que quieren contar. Yo no puedo decirles qué personajes crear pero sí les puedo ayudar a dar dimensión a sus personajes. No puedo decirles qué tema explorar pero puedo ayudarlos a explorar mejor el tema. Entonces, cuando enseño estoy enseñando los principios y los conceptos de estas ideas centrales. Yo enseño lo que es posible y dando una idea de la complejidad de estos temas.